20 septiembre 2009

La casa recomienda: Brüno, de Larry Charles


Hace tres años, muchos descubrimos al humorista Sacha Baron Cohen en Borat, un falso documental delirante acerca de un tipo de Medio Oriente -el país era imaginario, supongo que por dos razones: a) para no herir susceptibilidades; b) para no dejar afuera a ninguno- que viajaba a Estados Unidos con el objetivo de seducir a Pamela Anderson. Lo mejor de la peli era la estrategia, es decir que se trataba de un falso documental. Y por "falso" debe entenderse "real". Porque, si bien Borat no existía y su país de origen tampoco, lo que se mostraba en la pantalla sí había suedido. Y eso no sólo lo hacía más gracioso, sino también más inquietante.
Ahora, con Brüno, la dupla Cohen/Charles reincide pero profundiza. Reincide porque el esquema es el mismo -un personaje ficticio va de viaje a Estados Unidos y se filma sin avisarle a los participantes que se trata de una joda- pero profundizado. Brüno es un austríaco gay especializado en modas que desea "ser el austríaco más famoso desde Adolf Hitler", acaba de perder su programa fashion -imperdible la escena en que entra en el desfile con ropa hecha puramente con velcro- y parte rumbo a USA con la intención de armar un nuevo show y hacerse famoso -con la escena del focus group con el piloto de su programa me desternillé de risa-. A partir de entonces, lo que se suceden son escenas tan groseras como desopilantes, que muestran no sólo la homofobia en distintos ámbitos geográficos y sociales, sino también el significado de ser famoso en una sociedad como la actual. Para convertirse en lo que todos desean ser, Brüno sabe que debe abocarse a una causa humanitaria -desopilante la escena en donde entrevista a dos mujeres que se especializan en ayudar a los famosos a ser humanitarios por medio de fundaciones-, pero se enfrenta al problema de que muchos ya han sido asignados -el Amazonas para Sting, el Sida para Elton John, la pobreza para Bono, y así- y sólo le resta la paz en Medio Oriente. Brüno -y Baron Cohen, y Charles- parte hacia Israel, y ahí está le mejor de esta gran película, su intento de dar paz en sentido pueril por el hecho de entrevistar a palestinos e israelíes al mismo tiempo, y sobre todo en unos segundos que, creo, deberían pasar a la historia del cine: los productores del filme consiguen que Baron Cohen, como Brüno, entreviste a un encargado de prensa de Al Qaeda, y apenas comienzan Brüno le dice "tengo que confesarle algo, la barba de Osama Bin Laden es demasiado ochentosa".
Porque eso es lo que hacen Baron Cohen/Charles: si la cámara oculta sirve -por ejemplo, en el caso de Marcelo Tinelli- para burlarse de quien está en inferioridad de condiciones, en Brüno -y también en Borat, aunque menos- es utilizada para enfrentarse a alguien con más poder, para poner los huevos sobre la mesa y permitirnos ver el ridículo de quienes atemorizan, ya sea con Al Qaeda, con un cura chanta que dice que puede convertir a los homosexuales en hetero, con cazadores fascistas o con la población semianalfabeta del sur de Estados Unidos, absolutamente homofóbica.
Para los que no pude convencer con estas palabras, va el trailer:

Quienes no quieren aguardar al estreno y usan el Emule, les dejo el link a la peli y a los subtítulos .

Para los que se perdieron Borat, acá van el link a la peli y a los subtítulos .

7 comentarios:

Gizmo dijo...

Elemental, Borat era de Kazajstán (o Kazajistán, como parece estar de moda ahora), que es un país real, remanente de la antigua URSS, y de hecho, tuvo varios quilombos con el gobierno kazajo por eso.

Bruno la tengo en las pendientes, pinta increiblemente delirante.

Diego Grillo Trubba dijo...

Gizmo, ¡uy, tenés razón! ¡soy un salame! Se ve que en mi memoria había quedado que era un sitio tan irreal... Gracias por la observación. Y te recomiendo que Brüno no figure demasiado entre tus pendientes.

Koan Resuelto dijo...

Y si, iba a comentar lo del país también, de hecho, en donde viví el año pasado, un chico que llegó de Kazajstán en su primer día de escuela, se quedó despistado cuando el maestro se empezó a reir al escuchar su país de procedencia...
Tenés que ver la otra de Sacha (si no la has visto): Ali G...buenísima...

Diego Grillo Trubba dijo...

Koan, la vi, es muy buena, pero las siguientes son mucho mejores...

Unknown dijo...

Es una película genial en tantos sentidos...
Tiene esa capacidad de todo, taboo y poder incluído.
Ampliamente recomendada!!!!!!

Anónimo dijo...

Ayer la vi y no tiene desperdicios...

Lo del "dedito" de la cacerola vino a mi mente por una escena de la peli !! ja

Diego Grillo Trubba dijo...

Serena, me alegra que te haya gustado.

Anónimo, ¿la escena del supuesto espiritista?

Publicar un comentario