Martes, madrugada de miércoles (cont.).
Estoy a solas en la habitación. Son las doce y pico de la noche. O sea, las dos y pico de la madrugada en Buenos Aires. O sea, no duermo hace cuarenta horas. Se supone que debería tener sueño, que debería dejarme caer sobre la cama, pero descubro, al desvestirme, que no. Estoy pasado de sueño. Me recuesto, enciendo el televisor grande como la pared de mi dormitorio. Me fijo en la programación en pantalla. Dan "Love actually". Creo que podría verla siempre, cada noche. Hugh Grant baila en la casa de gobierno inglesa. Cool.
El timbre del teléfono parte la noche. Lo miro como si acabara de despertarme. ¿Qué carajo pasó? Atiendo.
-¿Elemental?
-¿Quién habla?
-¿No sabés quién soy?
-Eeeeehhhh... ¿Está muy mal no saberlo?
-Catherine Fulop.
-Ah, qué tal, cómo te va.
-Bien.
-¿Pasó algo?
-No.
-Ah.
-¿Era en serio?
-¿Qué cosa?
-Que estás cansado.
-Sí, muy.
-Mucho viaje, ¿no?
-Sí.
-¿Qué estabas haciendo?
-Durmiendo.
-Ah.
-...
-¿Eso que se escucha de fondo no es la televisión?
-Duermo con la televisión encendida. Le tengo miedo a la oscuridad, cuando estoy en países desconocidos.
-Pobrecito.
-¿Viste?
-¿No será que tenés miedo de dormir solo?
-...
-...
-No, Catherine.
-Ah.
-En serio. Gracias, pero no.
-Pero podría subir ahora.
-Esto no es un viaje de egresados.
-¿Un qué?
-Una costumbre argentina.
-Ah.
-...
-Podría subir ahora. Quiero charlar contigo.
-Gracias, pero no. Te juro que estoy muy cansado.
-¿Sabes cómo estoy yo?
-Mierda.
-¿Qué?
-Nada.
-Ah.
-...
-¿Sabes cómo estoy yo?
-No me digas que desnuda.
-En ropa interior, lista para vestirme y subir.
-Ah.
-Voy.
-...
-Voy, entonces.
-No, en serio. Estoy muerto.
-Pero si eres muy simpático.
-Pero no ahora. Tengo sueño.
-Pero...
Cuelgo. Enseguida levanto el tubo. Me comunico con el conserje, quien me comunica con Hugo Chávez.
-¿Hola?
-Huguito.
-¿Elemental?
-Sí.
-¿Qué pasa?
-Escuchame y no hables. Ahora voy a cortar. Llamala a Catherine.
-¿Cómo?
-Llamala y esta noche mojás.
-¿Cómo?
Cuelgo.
En la pantalla, Liam Neeson le pregunta a su hijo de ficción si ya aprendió a tocar la batería para seducir a una chica negra. Sonrío.
Suena el teléfono. Mierda. O Catherine se avivó de la movida, o Huguito quiere que le aconseje qué decir al teléfono.
-¿Hola?
-Elemental.
-¿Quién habla?
-Juana Rulfo.
-Ah, hola.
-¿Qué estabas haciendo?
-Bueno, subí.
Tampoco voy a rechazar dos en una misma noche.
15 comentarios:
JAJAJAJAJAJAJJAJAJAJAJA
DEMASIADO BUENOOOO
estoy saltando en la silla y aplaudiendo.
bravo.
wwEMFd? = Que haría el Editor más Fachero?
Juaaaaaaaaaaaaaaa. Ya no sos más aquel Elemental. Hacete cargo!
Muy Bueno
cómo remontó vuelo el blog el día de hoy!!!!
alto, alto.
despues cuando te vea te cuento cómo me hiciste quedar muy bien frente a un desconocido importante.
Jajajaajajj Buenisimo!!!!!
Bletemita, tu buena onda es un clásico de este blog.
Koan, buena pregunta.
Pushkar, gracias.
Kent, gracias. Ya hablaremos en persona.
Luminicus, gracias.
Como pasa con todo lo bueno...¡quiero más!
Ahh al final la van a pasar bien todos! ja. Muy bueno. Besos. Nati
Bravo Elemental lindo. Mira que agilidad la tuya, así se hace! (te aplaudo).
Besos
We love Hughie! Ese inglesito flemático esta cada día más bonito.
N.
D, pues ya lo tenés.
Nati, gracias.
Vacya, gracias.
N., un tipo al que detuvieron en un coche con una prostituta haciéndole un pete sólo merece mi empatía.
Elemental más aún sabiendo que Elizabeth Hurley lo perdonó!!!
N.
N, un grosso.
No, claro. Tampoco...
jajajaa qué winner...
Publicar un comentario