Sonia 02 (dNS): Security Man is padecing a tempest, he does´nt understand what carajo pasa and the angustia is a guest star

Martes.

Me despierto y pienso en Sonia 02 (dNS). Ayer, antes de dormirme, no me pajeé. Un poco para no gastar tanto antes del sábado. Otro poco porque pensaba en ella, y es sabido que si uno se pajea pensando en una mujer nunca, pero nunca, cogerá con ella. Hoy me despierto al palo. Van dos días seguidos. El efecto de la franela infinita del domingo parece haberme retrotraido a la adolescencia, a Clave de Sol, a Pelito, a Buscavidas con Luis Brandoni, que no tiene nada que ver pero era de esa época. Hoy tampoco voy a pajearme. A la mañana, así, no da. Además, tengo que dar clase. Mi alumna que prefiere clases individuales, que al verme llegar -el falo ya bajó, no hay problemas con el priapismo- me mira como si me estudiase. Le pregunto qué le pasa, me dice a vos te pasa algo. Sonrío, supongo. Me pongo colorado, supongo. Vos conociste a alguien, me dice. Niego con la cabeza. Vos conociste a alguien, insiste. Asiento. Con razón. El resto de la clase, me cuesta concentrarme: estoy calculando cuánto falta para el sábado, me pregunto qué hará Sonia 02 (dNS) en este preciso instante. La clase termina. Salgo a la calle. Minutos más tarde suena el celular. El Editor Más Fachero.
-Contame cómo te fue.
-Bien, muy bien.
-¿En serio?
-Si, nos conectamos mucho.
-¿Qué tal garcharon?
-Bueno...
-Dale, Elemental, amigo, ¿qué tal garcharon?
-No garchamos. Pero conectamos mucho.
-¿Pero vos no estabas buscando a alguien sólo para garchar?
-Sí... No sé...
-¿Estabas o no estabas?
-Estaba. Pero en una de esas no sirvo para eso. Lisa y llanamente.
-No me podés decir que te enamoraste...
-No, no es eso...
-Elemental...
-Bueno. Pero no es que me enamoré mucho, eh. Sólo que pienso en ella todo el tiempo.
-...
-Bueno, y cuando pienso en ella sonrío.
-...
-Pero el próximo sábado me la garcho.
-Batiste tu récord.
-¿Cuál?
-Te enamorabas al coger. Ahora te enamorás sin coger.
-No me jodas. Es raro, lo sé, pero...
-Está todo bien, nene. Si te sentís bien, disfrutalo. Después del final con No Sonia, te merecés sentirte bien.
-...
-¿Qué pasa?
-¿Sabés que sí? Me merezco sentirme bien.
-¿Es copada?
-Y, es psicoanalista.
-Ah.
-Pero no sé... Me mira de una forma... Es medio fóbica, me parece, pero la vengo manejando bien.
-¿Fóbica?
-Fóbica. Dice que siempre se las ingenia para arruinar cualquier relación.
-Apa.
-No, no es de la Apa.
-No, apa de epa.
-Ah.
-¿Vos estás bien?
-Sí.
-Entonces dale para adelante. Y ya que te hizo esperar, que el sábado entregue el orto.
-Ja.
-Ja.
-Vos sabés que el orto no es algo que me importe tanto. No al principio, al menos...
-Ja.
-Bueno, nene, nos vemos en el diario.
-Dale. Abrazote.
-Abrazote.
Corto. Camino por Las Heras rumbo al centro. Tomo el celular. Escribo "buen día, ¿cómo estás?". Envío el mensaje a Sonia 02 (dNS), aunque son las 12 del mediodía. Cuando lo hago, me doy cuenta de algo: desde que nos despedimos ayer, hasta ahora, ni siquiera había sentido el impulso de mandar un mensajito. ¿Estaré cambiando? ¿Será esto esa cosita loca que llaman madurez?
Sigo por Las Heras, luego rumbeo para Azcuénaga y Santa Fe. Tengo que entrevistar a un yanqui. Tengo tiempo. Me meto en un Mc Donald´s para almorzar. Cuando subo la escalera, bandeja en mano, el celular vibra. Sí, soy otro: espero a llegar a la mesa, apoyar la bandeja y sentarme, antes de mirar el mensaje. "¡Hola! Estuve atendiendo hasta recién. ¿Vos cómo andás? ¿Cómo te fue en la clase?". Sonrío. Escribo "Bien, aunque me costaba concentrarme porque pensaba en vos". La respuesta se demora. Aprovecho para empezar a comer. Unos diez minutos más tarde, el celular vibra: "¿Para tanto?". Meneo la cabeza. La gente que está en el resto de las mesas debe pensar que estoy loco. Termino la hamburguesa, bebo la coca-cola. Llamo. Sonia 02 atiende.
-¿Hola? -pregunta.
-Che, te dije algo lindo...
-...
-Te estaba diciendo algo lindo, con lo de que pensaba en vos...
-...
-Igual no te preocupes, sé que sos un poco fóbica, me lo dijiste, puedo ser paciente.
-...
-¿Hola?
-...
-¿Hola, estás ahí?
-La verdad, no me gusta la forma en que te relacionás conmigo.
-¿Lo qué?
-Hablamos en un rato, ¿sí?
-No entiendo. ¿Qué pasa?
-Te llamo en un rato. Necesito pensar.
-¿Pensar? ¿Lo qué?
Y corta. Y yo me quedo sentado en el Mc Donald´s, preguntándome qué carajo pasó.